Experiencia de costurera

Tras terminar la escuela, en donde las monjas les enseñaban el catecismo, se formó como costurera durante unos años, en dos costureros diferentes. Posteriormente, y gracias a una compañera, aprendió el corte del pantalón. A continuación narra como puso en su casa su propio costurero, en el que trabajaba tras dar un paseo y merendar, normalmente pimientos del cristal. Solían encargarle pantalones.

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secuencias de Mª Cruz Pascual Gorraiz