Matanza del cerdo

El cerdo se mataba entorno a la Purísima Concepción (8 de diciembre). Con ese se tenía para todo el invierno y en marzo se mataba otro, con vistas al verano. Las costillas y el lomo se ponían en aceite. También las longanizas. A las 6 de la mañana se iba al matadero, el cerdo ya estaba allí de víspera, y en el matadero esperaban los “matatxerris”. Se hacía un fuego con ollagas para limpiar el cerdo. Lo mataban, cogían la sangre, lo abrían en canal y las tripas se llevaban a casa, con el hígado y la colada, para empezar el mondongo. Para almorzar comían el hígado del cerdo. El veterinario tenía que ver que el cerdo estaba sano. La madre limpiaba las tripas para las morcillas. Se hacían con sangre y arroz... Al mediodía los matatxerris llevaban el cerco a casa, lo descargaban en la mesa de la entrada y preparaban todo descuartizado. Les pagaban y les sacaban un vino. A los familiares más cercanos se les daba el presente. Luego el presente les era devuelto. Al párroco también se les daba.