La guerra

El entrevistado tenía once años cuando estalló el Movimiento y estaba pasando el verano en casa de sus tíos en Ochagavía. Recuerda como por la noche se escucharon disparos. Volvió a Sangüesa en verano. Al ser de familia nacionalista, estaban fichados y tenían que ir al cuartel a firmar ante los guardias. Les llevaban comida a los guardias. Del pueblo enviaron a muchos jóvenes al frente, tanto obligados como voluntarios. A algunas mujeres les cortaron el pelo y les dieron aceite de ricino. En la inundación de 1937 emplearon a estas mujeres para que retirasen el barro de las calles.

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secuencias de Nicolás Navallas Martiz