Contratación de jornaleros

Para que le contratasen debía acudir hacía las seis de la mañana a las “Cuatro Esquinas”, lugar en el que se encontraban con los patrones. Los contratos eran por día y podían ser renovados para el siguiente al finalizar la jornada, evitando así tener que volver a la plaza. Cuando no eran contratados o hacía mal tiempo regresaban a casa, y en su caso ese día ayudaba a su padre.

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secuencias de Jesús Bandrés Baigorri